La Dra. Luz María Valdez y el Dr. Alejandro Ríos de la Universidad de Monterrey, participaron en la realización de un estudio multidisciplinario que analizó la importancia de la inteligencia emocional y la habilidad analítica en los empleados de algunas empresas en Querétaro y Nuevo León.

El estudio involucró también a profesionales de otras universidades para conseguir resultados más completos y con perspectivas más amplias. Los profesores investigadores trabajaron una metodología cuantitativa para entender cuál es la relación entre los valores anteriormente mencionados y la competitividad organizacional.

La Dra. Valdez y el Dr. Ríos realizaron este instrumento en 2022, mientras que la pandemia del COVID-19 aún era vigente y tenía rezagos importantes en la moral de los participantes de la investigación.

A pesar de que se pensaba que esto limitaría la exposición de la importancia de la inteligencia emocional, el resultado fue el contrario, ya que se logró demostrar una mayor diferencia entre la competitividad organizacional de aquellas empresas cuyos empleados sí contaban con inteligencia emocional, y aquellas empresas cuyos empleados no. 

La investigación encontró a través de las encuestas, que como se pensaba previo a su realización, tanto la inteligencia emocional como la habilidad analítica impactan directamente en la competitividad organizacional. El trabajo también contextualizó ampliamente que la inteligencia emocional impera en múltiples factores de desarrollo del capital humano, ya que no solo afecta la forma de sentir de los empleados, sino que también dicta su manera de reaccionar al cambio y la crisis. 

Se puede comprender de manera empírica que, durante la pandemia, los negocios que mejor se desarrollaron fueron aquellos cuyo capital humano presentó mejores capacidades de inteligencia emocional al enfrentar la pandemia, logrando así mantener una proactividad constante a pesar de las dificultades personales y sociales que trajo consigo la pandemia del COVID-19.